¿Qué es un Mito, una Leyenda y una Fábula? ¿Cuál es la diferencia?
La leyenda
La leyenda de Sara Chogllo
Sara Chogllo era una guerrera por naturaleza, de la misma estirpe de Mama Huaco. Como todas las mujeres de su raza, apoyaba incondicionalmente a su compañero Wiru en el campo de batalla. Un día, en el calor de la lucha, una larga
flecha de bambú encontró fatalmente el corazón de la mujer y le robó el calor de su aliento. Wiru, al mirar el cuerpo inerte de su amada, se arrodilló a su lado y lloró tan profundamente que sus lágrimas formaron un río que purificó las heridas de la joven.
La madre Quilla, la luna, y el padre Inti, el sol, acompañaron callados la pena del guerrero. Cuando el dolor de Wiru se calmó, del corazón de Sara Chogllo brotó una planta hermosa que gradualmente tomó la forma de una guerrera altiva.
Al cuerpo que apenas germinaba le crecieron dientes fuertes y sanos como la sonrisa luminosa de una mujer. Su cabello largo y brillante se convirtió en una capa protectora y sus faldas se tornaron verdes y envolvieron al hermoso fruto.
Cuando este terminó de crecer, Wiru lo arrancó tiernamente con sus manos, lo llamó chogllo, y lo guardó muy cerca de su corazón. Fue directamente al templo a ofrecerle al dios Wiracocha el fruto recién nacido del corazón de su compañera.
Wiru aprendió por los consejos de los amautas, los maestros andinos, que debía devolver el fruto a la Pachamama, la Madre Tierra, en donde crecería y se multiplicaría, alimentaría a los hijos de su pueblo, y a los hijos de sus hijos, haría sanos sus cuerpos y fuertes sus brazos y los volvería una raza de hombres invencibles.
Así lo hizo Wiru. Desde entonces, año tras año, los incas siembran el maíz en el mes del Capac Raymi, en diciembre, cuando empiezan a caer las lluvias. Y cuando han cesado las lágrimas del cielo, en el mes de Hatun Cusqui, en mayo, la Pachamama entrega a los descendientes de Wiru porciones generosas del noble chogllo, que tiene el sabor amargo de las lágrimas de Wiru y el dulce aroma de su eterna compañera.
Así es que en el Perú, la tierra de los incas, se consume el maíz tierno, al que le llaman choclo, en homenaje a la valiente guerrera y al amor de su compañero.
Recuperado y adaptado de https://www.costumbresperu.pe/portfolio-view/la-leyenda-de-sara-chogllo/#.XX-daChKiUk